“Caminante
no hay camino, se hace el camino al andar; y al echar la vista atrás…”. Al
echar la vista atrás lo que se ve es la estación de King´s Cross, una de las
zonas de moda al norte de Londres. Allí es donde está ubicado el restaurante Camino, una palabra española con una
carga emotiva tan fuerte como el amor que el dueño y fundador de este local, el londinense Richard Bigg,
profesa por España desde su juventud.
Junto a Camino se encuentra Bar Pepito,
también de indudable sello español pero más vinculado al mundo del vino y,
particularmente, del sherry. A estos dos locales se accede a través de una
pequeña callejuela, pero esta discreta entrada no impide que semana a semana
ambos restaurantes estén abarrotados de clientes; tanto españoles expatriados en busca de una pequeña isla española en
pleno centro de Londres, como amantes de la gastronomía ibérica de muchas otras nacionalidades. Tras
el éxito de estos dos espacios gastronómicos Bigg ha abierto un tercer pub, Copa de Cava, dedicado a esta bebida y a los
maridajes perfectos para cada cava.
Detrás de
cada restaurante hay una historia y una personalidad diferentes. Actualmente hay tres restaurantes Camino en Blackfriars, King’s Cross y Monument,
y el primero de ellos, el que se encuentra junto a la transitada estación,
abrió en 2007. Bigg recuerda cómo “se enamoró de España, del país, de su gente
y, sobre todo, de su comida y su bebida en 1982 durante un viaje en coche por
todo el país”. El nombre del restaurante viene precisamente por el camino que
recorrió por toda la península y que desde entonces parece mirar siempre desde
el retrovisor. Tampoco ha dejado de viajar a España y de aprender sobre su gastronomía,
un conocimiento y una pasión que ha trasladado a Camino.