Muchas empresas no solo evalúan
las capacidades, conocimientos o experiencia de los posibles candidatos a un
puesto de trabajo, sino también sus rasgos de personalidad mediante algún tipo
de test. Pero, ¿qué buscan exactamente en los resultados de un test? O, en
otras palabras, ¿qué cualidades valoran más los empresarios en sus
trabajadores?
Los psicólogos Sackett and
Walmsley, de la Universidad de Minnesota, realizaron un estudio para tatar de
averiguarlo utilizando el modelo de los cinco grandes rasgos de la personalidad
(estabilidad emocional, amabilidad, responsabilidad, extraversión y apertura a
la experiencia).
Los investigadores analizaron
datos procedentes de entrevistas de trabajo para descubrir qué rasgos de la personalidad
buscan las empresas cuando quieren contratar a alguien. La mayoría se trataba
de entrevistas estructuradas destinadas a encontrar candidatos con unas
determinadas características de personalidad. Por ejemplo, la empresa que busca
específicamente personas extravertidas y amistosas para un trabajo relacionado
con las ventas.
Lo que descubrieron tras
analizar los datos es que
la característica de personalidad más valorada, por
encima de las otras cuatro, es la Responsabilidad, nombre que se utiliza para
una amplia dimensión de la personalidad que hace referencia a las personas que
son
dignas de confianza, perseverantes, ordenadas y disciplinadas. En segundo lugar
se encontraba la
Amabilidad, que implica
cooperar con los demás, ser amistoso,
agradable, tolerante y flexible.
Después, los investigadores se
preguntaron si estas características eran realmente las mejores; es decir, si
eran las que predecían mejor el rendimiento en el trabajo. Para responder a
esta pregunta analizaron la relación existente entre los cinco grandes rasgos
de personalidad y tres criterios relacionados con el rendimiento laborar:
si un trabajador es capaz de realizar el trabajo satisfactoriamente, con qué
frecuencia se implica en comportamientos negativos y con qué frecuencia se
supera o se queda rezagado en el trabajo. De nuevo, los rasgos de
responsabilidad y amabilidad resultaban ser los ganadores, siendo la
responsabilidad la dimensión más relacionada con el rendimiento laboral en
general y ocupando la amabilidad el segundo puesto.
Por supuesto, en función del
tipo de trabajo pueden valorarse más unos rasgos que otros. Por ejemplo, la
amabilidad puede no ser demasiado importante si haces un trabajo que implica
estar solo la mayor parte del tiempo. No obstante, la responsabilidad es, sin
duda, un rasgo que va a valorar cualquier empresario que desee contratar a
alguien para cualquier tipo de trabajo.
En los artículos
Los 5 rasgos de la personalidad: Responsabilidad y
Los 5 rasgos de la personalidad: Amabilidad encontrarás una
descripción más completa de ambos rasgos, sus características y subdimensiones.
Pueden servirte como una guía para conocer cuáles son las cualidades que tienes
que fomentar, no solo para conseguir un nuevo trabajo, sino también para
ascender dentro de tu actual empresa o conservar tu trabajo durante más tiempo. Es decir,
tu empleabilidad.